En 2016, Facebook llevó a cabo un proyecto secreto para espiar los datos de los usuarios de Snapchat y más tarde utilizó el mismo método de fisgoneo en YouTube y Amazon para obtener una ventaja competitiva, según documentos judiciales recientemente desvelados.

Meta utilizó un programa espía para acceder a las actividades de los usuarios en plataformas rivales, incluidas Snapchat, Amazon y YouTube, según documentos recientemente desvelados de una demanda colectiva. Los dueños de Facebook argumentan que los usuarios dieron su consentimiento para proporcionar datos sobre el uso de otras aplicaciones.

El proyecto “Cazafantasmas”

Los documentos (procedentes de una demanda colectiva entre consumidores y la empresa matriz de Facebook, Meta) alegan que la operación interna, cuyo nombre en clave era “Proyecto Cazafantasmas”, se llevó a cabo a petición del consejero delegado de Meta, Mark Zuckerberg.

Según los documentos, hechos públicos esta semana, el equipo de Onavo presentó y puso en marcha un proyecto con el nombre en clave de “Cazafantasmas” (en referencia al logotipo de Snapchat) en el que desarrollaron “kits que se pueden instalar en iOS o Android y que interceptan el tráfico de subdominios específicos”, lo que les permite “leer lo que de otro modo sería tráfico cifrado para que podamos medir el uso dentro de la aplicación”.

“Siempre que alguien hace una pregunta sobre Snapchat, la respuesta suele ser que, como su tráfico está encriptado, no tenemos datos analíticos sobre ellos“, escribió Zuckerberg en un correo electrónico de junio de 2016 a tres ejecutivos de la empresa, según los documentos.

“Dada la rapidez con la que crecen, parece importante encontrar una nueva forma de obtener análisis fiables sobre ellos. Quizá tengamos que hacer paneles o escribir software a medida. Deberías averiguar cómo hacerlo”, continuaba el correo electrónico de Zuckerberg.

La solución que se les ocurrió a los ingenieros implicaba el servicio de red privada virtual (VPN) de la empresa, Onavo, que permitía a Facebook “espiar”, “interceptar” y “descifrar” los datos analíticos protegidos de Snapchat, dicen los documentos.

El equipo de Onavo supuestamente desarrolló “kits” que les permitían leer “lo que de otro modo sería tráfico encriptado” para medir la actividad in-app de su competidor. Según los documentos, Facebook desplegó posteriormente la técnica de espionaje contra YouTube de 2017 a 2018 y contra Amazon en 2018.

EE.UU. investiga a Facebook por espiar usuarios de Snapchat

“El resultado previsto y real de este programa era perjudicar a la competencia, incluido Snapchat, el entonces incipiente competidor de Facebook en Publicidad Social“, argumentaron los demandantes en la presentación.

Un portavoz de Meta rechazó las alegaciones en un correo electrónico enviado a NewsNation, escribiendo: “No hay nada nuevo en este asunto: ya se informó de él hace años. Las alegaciones de los demandantes carecen de fundamento y son completamente irrelevantes para el caso”.

En un escrito desvelado el martes, los abogados de Meta afirmaron que los usuarios de la “Aplicación de Investigación de Facebook” consintieron en proporcionar a la empresa datos sobre su uso de otras aplicaciones.

La empresa también argumentó que Snap, la empresa matriz de Snapchat, “no sabe si alguna de las investigaciones de Meta proporcionó a Meta una ventaja competitiva”.

Snap todavía no se ha pronunciado al respecto.

Meta es significativamente mayor que Snapchat tanto en alcance de audiencia como en escala financiera. La empresa matriz de Facebook, Instagram y Threads tiene actualmente una capitalización bursátil de 1,24 billones de dólares, mientras que Snap, la empresa matriz de Snapchat, sólo vale 19.000 millones de dólares. Snapchat tiene 800 millones de usuarios activos mensuales, que palidecen en comparación con los 3.000 millones de Facebook y los 2.000 millones de Instagram.

En 2019, Facebook cerró Onavo después de que una investigación de TechCrunch descubriera que Facebook había estado pagando a adolescentes para que utilizaran la VPN para acceder a su actividad web.

Los últimos documentos proceden de una demanda colectiva presentada en 2020. Los demandantes son un grupo de consumidores que acusan a Facebook de explotar los datos de los usuarios para mantener su poder de mercado. La empresa ha negado las acusaciones.